Cuando la suegra exige lo imposible: Crónica de una mesa española
Me llamo Carmen y jamás olvidaré la Nochebuena en la que mi suegra, Rosario, me pidió preparar el cocido madrileño exactamente como lo hacía su madre. El año anterior fue un desastre y este año, por primera vez, me atreví a decir que no. Aquella decisión desató una tormenta familiar que cambió mi vida para siempre.