La Lección de la Cafetería: Un Padre, Un Hijo y la Vida Real
Me llamo Tomás y jamás olvidaré el día que descubrí que mi hijo, Sergio, llevaba semanas faltando al instituto. Mi reacción fue visceral: en vez de castigarle sin más, le obligué a trabajar conmigo en la cafetería del barrio. Lo que empezó como una lección terminó por cambiar nuestra relación y abrir heridas familiares que nunca imaginé.