Regalos de oro en casa ajena: El precio de la generosidad
Me llamo Marta y desde que nació mi hijo Lucas, la relación con mis suegros ha sido una montaña rusa de emociones. Ellos, con su vida acomodada y su casa llena de lujos, insisten en colmar a Lucas de regalos que nunca puede llevarse a nuestro piso modesto. Entre la frustración, la impotencia y el deseo de proteger a mi hijo, he tenido que enfrentarme a mi marido y a mis propios miedos sobre lo que significa ser madre en una familia dividida por el dinero.