Herencia envenenada: El precio de la sangre
La muerte de mi suegra destapó una herida familiar que nunca imaginé. El testamento, lejos de unirnos, nos enfrentó a una verdad incómoda: la desigualdad y la avaricia pueden romper incluso los lazos más fuertes. Ahora, me pregunto si el dinero realmente vale más que la familia.