Cuatro Almas y Un Solo Techo: Mi Vida en un Estudio con Mi Hijo y Mi Suegra
Me llamo Lucía y nunca imaginé que la vida pudiera apretarnos tanto, no solo en metros cuadrados, sino en emociones. Compartir un diminuto estudio en Lavapiés con mi marido Diego, nuestro hijo Mateo y, de pronto, mi suegra Carmen, nos llevó al límite de la paciencia y el amor. Entre discusiones, secretos y sueños aplazados, aprendí que la verdadera distancia no siempre es física.