La herencia del silencio: Cuando la familia duele más que la pobreza
En medio de una discusión acalorada con mi marido, me enfrento a la realidad de que sus padres, con todos sus recursos, nos han dado la espalda en el momento más vulnerable de nuestras vidas. La llegada de nuestro primer hijo, lejos de unirnos, ha destapado viejas heridas y resentimientos familiares. Ahora, me debato entre el orgullo, la rabia y el miedo a que mi hijo crezca en un hogar marcado por el rencor.