Cuando la Casa se Llenó de Silencios

Cuando la Casa se Llenó de Silencios

Una noche, mi marido Tomás me anunció que su primo y su familia vendrían a vivir con nosotros por problemas económicos. Yo, que siempre había valorado la tranquilidad de nuestro hogar tras la marcha de nuestro hijo Pablo a la universidad, sentí cómo mi mundo se tambaleaba. Entre tensiones, secretos y el peso de la crisis, aprendí que el verdadero conflicto no era solo el dinero, sino lo que estábamos dispuestos a sacrificar por los demás.