El día que desinvité a mi familia de mi boda: ¿Demasiado lejos o justo a tiempo?
La noche antes de mi boda, escuché a mi padre decir palabras que me rompieron el alma. Decidí, entre lágrimas y rabia, desinvitar a toda mi familia de la ceremonia. Ahora me pregunto si fui demasiado lejos o si, por fin, me defendí como debía.