El desayuno que nunca llegó: Mi vida con Miguel

El desayuno que nunca llegó: Mi vida con Miguel

Desperté una mañana con la voz de la madre de Miguel exigiendo que le preparara el desayuno. Ese fue el último empujón que necesitaba para abandonar una relación que me había ido apagando poco a poco. Ahora, mientras repaso cada momento, me pregunto si alguna vez es posible cambiar a alguien o si solo nos engañamos creyendo que el amor lo puede todo.