Puré de papas, pollo y un divorcio que nunca llegó
Regresé a casa tras una jornada agotadora en el supermercado, esperando encontrar el mismo vacío de siempre. Pero esa noche, el aroma a comida casera me sorprendió y desató una conversación que cambió mi vida. Entre el puré de papas y el pollo, enfrenté las heridas de mi matrimonio y descubrí que a veces, lo que no se dice pesa más que cualquier grito.