Expulsada de mi propia vida: «No eres madre, eres una maldición» – Mi caída y lucha por mi hijo
Mi historia comienza la noche en que mi marido, consumido por la rabia y el miedo, me echó de casa culpándome de la enfermedad de nuestro hijo. Me vi sola, sin hogar ni derechos, mientras mi familia y vecinos me daban la espalda. Pero no me rendí: luché por mi hijo y por mi dignidad, aunque todos me consideraran culpable.