Las noches largas de Ricardo: Cuando el amor se apaga en silencio
Mi nombre es Carmen y, a los 53 años, descubrí que mi marido llevaba una doble vida. Durante meses ignoré las señales: las llamadas a deshoras, los fines de semana fuera, su mirada distante. Ahora, enfrentando la soledad y el dolor, me pregunto cómo pude perderme a mí misma por salvar un matrimonio que ya no existía.