El día que la herencia rompió mi familia
Ayer, mi suegra reunió a toda la familia para leer el testamento y, desde ese momento, nada volvió a ser igual. Vi cómo mi marido, Álvaro, se desmoronaba al descubrir que su hermano menor, Sergio, recibiría el piso familiar en el centro de Madrid, mientras que a nosotros solo nos dejaban una pequeña casa de verano en la sierra. Ahora me pregunto si alguna vez podremos reconstruir lo que se rompió entre nosotros.