Nido vacío, esperanza encendida: La soledad de Carmen
Despierto cada mañana en una casa que parece demasiado grande para una sola persona. Mis hijos, Lucía y Álvaro, han volado lejos, persiguiendo sus sueños, mientras yo me aferro a los recuerdos y a la esperanza de volver a verlos juntos en nuestro hogar. Entre la soledad, los silencios y la ayuda ocasional de mi vecino Manuel, lucho por encontrar sentido a esta nueva etapa de mi vida.