La cicatriz que nunca sanó
En la sala de espera de un hospital madrileño, un desconocido me reconoce por una cicatriz de la infancia y despierta recuerdos enterrados de un campamento en la Sierra de Gredos. El reencuentro inesperado reabre heridas familiares y secretos que creía superados. A través de este encuentro, revivo el dolor, la culpa y la esperanza de reconciliación con mi pasado y mi familia.